Uan actitud a tener en cuenta en Europa tantas veces nagativa con las aportaciones históricas del cristianismo.
(Aleteia) En el día de su juramento como nuevo presidente de Egipto, el ex general
Abdel Fattah al-Sisi rindió homenaje con palabras importantes al papel
desempeñado por la Iglesia copta en el pasado y el presente de la gran
nación árabe. En su discurso a la nación, pronunciado en la tarde del
domingo 8 de junio en el Palacio el-Quba -que probablemente se
convertirá en la nueva residencia presidencial-, al Sisi dedicó un
pasaje importante a los cristianos.«El nuevo presidente», refiere a la agencia Fides Anba Antonios Aziz Mina, obispo copto católico de Guizeh, «dijo que la Iglesia ha jugado un papel importante en la historia de Egipto y ha dado una contribución innegables para salvaguardar la unidad nacional, haciendo frente a quienes fomentaban los conflictos dentro del pueblo egipcio».
El presidente, añade Anba Antonios, «también dijo que la Iglesia, junto con la Universidad sunita de al-Azhar, puede hacer una valiosa contribución para liberar el tema religioso de las instrumentalizaciones que ha sufrido en los últimos años».
En la mañana del domingo 8 de junio, el patriarca copto ortodoxo Tawadros II y el imán de Al-Azhar, Ahmed al-Tayyeb, estaban invitados entre las más altas autoridades del país a la ceremonia de toma de posesión del nuevo presidente, que tuvo lugar en el palacio de la Corte Constitucional.
Asimismo, durante el discurso de la tarde a la nación, el protocolo reservó al patriarca Tawadros y al imam al -Tayyeb -sentado uno al lado del otro– un lugar especial.
En las intervenciones pronunciadas durante el día, el presidente al-Sisi rechazó cualquier posibilidad de reconciliación con las fuerzas que han llevado a cabo actos violentos –con una clara referencia a los Hermanos Musulmanes- y dio las gracias calurosamente a las delegaciones extranjeras que asistieron a las ceremonias de inicio de su mandato presidencial –como la delegación de Arabia Saudita- por haber apoyado a Egipto en las convulsiones de los últimos tiempos.
El presidente, añade Anba Antonios, «también dijo que la Iglesia, junto con la Universidad sunita de al-Azhar, puede hacer una valiosa contribución para liberar el tema religioso de las instrumentalizaciones que ha sufrido en los últimos años».
En la mañana del domingo 8 de junio, el patriarca copto ortodoxo Tawadros II y el imán de Al-Azhar, Ahmed al-Tayyeb, estaban invitados entre las más altas autoridades del país a la ceremonia de toma de posesión del nuevo presidente, que tuvo lugar en el palacio de la Corte Constitucional.
Asimismo, durante el discurso de la tarde a la nación, el protocolo reservó al patriarca Tawadros y al imam al -Tayyeb -sentado uno al lado del otro– un lugar especial.
En las intervenciones pronunciadas durante el día, el presidente al-Sisi rechazó cualquier posibilidad de reconciliación con las fuerzas que han llevado a cabo actos violentos –con una clara referencia a los Hermanos Musulmanes- y dio las gracias calurosamente a las delegaciones extranjeras que asistieron a las ceremonias de inicio de su mandato presidencial –como la delegación de Arabia Saudita- por haber apoyado a Egipto en las convulsiones de los últimos tiempos.
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